Entramos en la fase final de promoción, lo que significa una cosa: James Cameron está desatado. No ha parado de compartir declaraciones en las últimas semanas referentes a 'Avatar 3: Fuego y ceniza', dejando claro su punto de vista, porque si algo quiere dejar claro es que es su obra, algo personal, a pesar de ser una producción gigantesca. Pocos directores pueden permitirse un lujo así, pero incluso él ha tenido tensiones creativas que han acompañado el proyecto. A él no le tembló el pulso en ningún momento al dividir la segunda película en dos partes, pero a la productora sí le entraron dudas, que obviamente se disiparían al ver el fenómeno mundial en el que se convertiría 'Avatar' allá por 2009.
Para Cameron, las tres primeras películas forman parte de una misma historia dividida en actos, más cercana a una saga épica que a una sucesión de continuaciones. Según él, 'Fuego y ceniza' representa un tercer movimiento dentro de un plan narrativo único concebido desde el inicio. El director ha insistido en que Avatar 3 no debe considerarse simplemente una secuela convencional, y no nos extrañaría que ya esté preparando maratones donde la gente pueda pasarse el día entero viendo la trilogía de Avatar, dejándose los ojos en 3D, porque como ya ha declarado en varias ocasiones, es algo que le apasiona.
Por si alguien no se había dado cuenta, el cineasta ha subrayado que Pandora es un espejo de nuestro mundo, y que la película pretende invitar a la reflexión sobre el rumbo de la humanidad, en concreto del "ciclo de violencia" en el que nos encontramos, según él. En entrevistas recientes, sin querer desvelar demasiado de esta tercera entrega, deja entrever que tendrá un trasfondo más oscuro, en el que se abordan temas universales y problemáticas reales que conectan con la actualidad, por lo que en cierto modo será más políticamente atrevida, suponemos. No es que vaya a señalar a nadie a estas alturas, pero quizás sí encontremos unas connotaciones más claras de cuál es la visión de Cameron de nuestro presente. Y es que según él, el mundo desde el lanzamiento de la primera película "sólo ha ido a peor".
Ya sabemos que 'Avatar: fuego y ceniza' será la entrega más larga de la saga, algo que los fans recibirán con los brazos abiertos, porque si algo inició 'Avatar' además del 3D fue la época de los blockbusters de larga duración. Además, también para alivio de todos, aseguró que en 'Avatar: Fuego y ceniza': "no ha utilizado ni una pizca de IA para su desarrollo. Honramos y celebramos a los actores. No los reemplazamos. Eso llegará a su límite". No son pocos los cineastas y artistas del medio que se han mostrado ya en contra de la inteligencia artificial, desde Christopher Nolan, Guillermo del Toro, hasta Vince Gilligan o la hija de Robin Williams, Zelda Williams, cansada de ver cómo usaban tal herramienta para generar vídeos de su padre, que falleció en 2014.
Podríamos pensar que James Cameron está sentado en un sillón celebrando de antemano, con tranquilidad, otro billón de dólares en su bolsillo, pero no parece ser así. "Estoy más nervioso que nunca con Avatar. No estoy seguro de que 'Fuego y ceniza' vaya a funcionar, y por si acaso he planificado un final alternativo para que la saga termine en este punto", ha declarado en una de sus muchas entrevistas recientes. Esto no quiere decir que no tenga ganas de continuar la franquicia, porque como ha dejado claro también, tiene todo listo para encargarse del resto de entregas él mismo, sin tener que ceder el testigo a nadie. Y eso que tiene otros títulos ya planificados, tanto como director como productor. Queda poco para que sepamos si esta tercera película de Avatar está a la altura.
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